La tarifa media en avión de Fuerteventura a Madrid cuesta 22 euros más desde que gobierna el PP
• El Gobierno Rajoy se ha visto obligado a reconocer que durante su gestión hay menos plazas y menos compañías que operan con la isla
• Entre 2011 y 2014, Fuerteventura ha perdido tres conexiones marítimas y dos aéreas directas con otros puntos del país
• La pretendida privatización de Aena olvida a los residentes y deja la conectividad de Canarias en manos de las compañías aéreas, sus cuentas de resultados y sus políticas empresariales
Los majoreros están más aislados desde que gobierna el Partido Popular en España. Fuerteventura está peor conectada con otras ciudades españolas, tanto en los servicios marítimos insulares de línea regular como en los enlaces directos con el aeropuerto de Fuerteventura, con menos compañías aéreas, menor oferta de plazas y una tarifa más cara en vuelos directos a Madrid. El propio Gobierno Rajoy se ha visto obligado a reconocer, a preguntas del PSOE, que durante su gestión el precio medio de un billete ida y vuelta entre la isla y la capital de España es 22 euros más caro.
El secretario general del Partido Socialista en Fuerteventura, Blas Acosta, pone el acento en el «duro e injusto modelo de recortes impuesto por el PP, que ha provocado una larga lista de pérdidas en derechos sociales y el empobrecimiento general de casi todas las familias españolas; un exponente de esta política regresiva es el aislamiento forzoso que provoca a los habitantes de territorios insulares y lejanos como Fuerteventura. Sólo los esfuerzos realizados desde el Cabildo por incrementar la conectividad turística compensan en parte este abandono de los majoreros y su derecho a salir de la isla».
Blas Acosta destaca así mismo el trabajo realizado por el diputado del PSOE por Las Palmas, Sebastián Franquis, que ha mantenido un marcaje estrecho al Gobierno Rajoy con preguntas en el Congreso en relación a la conectividad de Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaria.
Las baterías de preguntas en el Congreso del diputado Franquis ha sacado a la luz que en 2011 Fuerteventura estaba conectada regularmente vía marítima con 14 ciudades españolas, cifra que se ha reducido a 11 en el año 2014.
En cuanto al transporte aéreo, el número de ciudades españolas con enlace directo con el aeropuerto de Fuerteventura era de 11 en 2011, bajando a nueve en 2014. También ha disminuido el número de compañías aéreas que conectan el aeropuerto de Fuerteventura con la Península de siete a seis en el periodo antes indicado.
Respecto a las tarifas utilizadas a lo largo de cada año por los pasajeros residentes, el precio medio de un viaje de ida y vuelta de Fuerteventura a Madrid, sin incluir el importe correspondiente a las prestaciones públicas patrimoniales por salida de pasajeros, pasajeros con movilidad reducida (PMR) y de seguridad, ha pasado de 201,07 euros en 2011 a 222,95 euros en 2014, lo que supone un incremento de 21,88 euros.
En cuanto a la oferta de plazas que conecta el aeropuerto de Fuerteventura con la Península en el periodo señalado, la reducción de plazas ha sido de 174.700 (de 570.662 plazas en el año 2011 a 395.962 en 2014).
Por ello, el diputado Sebastián Franquis considera que «tenemos razones suficientes para preocuparnos por la conectividad de Canarias y, en particular, de la isla de Fuerteventura, al existir una tendencia en la reducción de vuelos y en la necesaria frecuencia, así como por el notable aumento de los precios de los billetes, al menos durante estos últimos años».
Si a todo esto le unimos la pretensión del gobierno de privatizar Aena, la conectividad de Canarias dependerá exclusivamente de las presiones de las compañías aéreas, de sus cuentas de resultados e incluso de sus políticas empresariales. Los residentes en las islas pasarán a un segundo plano.
«La necesidad de mejorar la conectividad de nuestras islas debe ser una demanda permanente e irrenunciable porque lograr un transporte aéreo y marítimo más eficiente y competitivo es esencial para el desarrollo integral de Canarias y para fomentar intercambios comerciales, turísticos y culturales», afirma Franquis.